En estos últimos años, la medicina estética y la estética se han aliado para buscar mejorar la aceptación y calidad de vida de muchas personas.

Veamos algunos datos y verdades sobre esta tendencia que va ganando cada vez más terreno.

Una realidad es que la esperanza de vida se ha incrementado en las últimas décadas y trepa hasta los 70 o 75 años en promedio, por lo que la gente que llega a esta edad muchas veces busca verse mejor y/o más joven. La mayoría aspira a perder peso y a mantenerse dentro de un valor saludable, o incluso hay quienes recurren a algún tratamiento para lograr algún cambio en particular.

Si bien la mayor parte de la gente busca deshacerse de los kilos de más por una cuestión estética, el procurar mejorar la salud es otro factor desencadenante a la hora de tomar esta decisión. Pues bien, hablemos de detalles a tener en cuenta con respecto a la medicina estética en general.

“No puede manifestarse en el exterior lo que no se lleva por dentro”

Esto es cierto, ya que si no se controlan ciertos parámetros internos -tales como el colesterol, la glucosa, la presión arterial- y se evitan malos hábitos como el cigarrillo y el alcohol, muy difícilmente se logrará una buena imagen exterior, más juvenil y saludable.

“El sobrepeso u obesidad no tratadas a tiempo llevan a una distorsión corporal”

Verdad. Cada cuerpo tiene un peso saludable, según estatura y contextura, sobrepasarse de él, no solo sobre exige al organismo comprometiendo su salud, sino que también puede distorsionar la imagen corporal. Si se ha ganado peso, habrá que perderlo cuanto antes, y si ha quedado flaccidez, lo mejor será tratarlo para recuperar la figura previa.

“La pérdida de cabello no ayuda en la conservación de la juventud”

Cierto. Uno de los factores que menos ayudan en la conservación de la juventud es la caída del cabello, sobre todo entre los hombres. La buena noticia es que cualquier problema que se tenga, existen tratamientos específicos para recuperar el cabello. Un avance de la medicina estética, ofrece desde la mesoterapia capilar cuya finalidad es la reactivación del ciclo de funcionamiento de los folículos pilosos, hasta tratamientos como plasma rico en plaquetas (PRP) generando nuevos capilares sanguíneos en torno al folículo piloso aumentando así su irrigación, oxigenación y nutrición. Ya en casos muy avanzados, existe la posibilidad de trasplante capilar.

Lo mejor para saber qué camino tomar ante cualquier problema estético, será estar bien informado, es decir, dar con el profesional y/o el lugar adecuado.

Tiene que haber un conocimiento en profundidad de ambas partes: el paciente para saber dónde está y qué posibilidades tiene para conseguir su objetivo; y el profesional para saber qué se busca y poder ofrecer una alternativa viable y realista.

Dra. Débora Azuaje
Centro Médico Azuaje
Medicina Estética y Nutrición

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